Hoy 7 de agosto la casa de Nariño tiene un nuevo ocupante y este es el Presidente Juan Manuel Santos, hombre estudioso, vigoroso en inteligente, que sin nunca antes aspirar a un cargo público, logro ganar con una contundencia bastante grande sobre el poco carismático “Profesor Mockus”, en las elecciones presidenciales de este años, pues bien Son muchos los retos que deberá enfrentar el nuevo inquilino de la Casa de Nariño. Uno de estos y tal vez el más importante en estos momentos es la necesidad de recomponer las relaciones internacionales con los países hermanos como Venezuela y Ecuador, hacer cierta la multilateralidad, la integración latinoamericana y la profesionalización de la Cancillería. Concretar acuerdos interregionales para el buen funcionamiento del sistema político de nuestro país. El Presidente tendrá que volver a retomar el contacto con Obama, sin renunciar a la integridad, la soberanía y nuestra libre autodeterminación. Atrás tiene que quedar el concepto de adopción por parte de la Casa Blanca. Bush ya hace parte del pasado. Hay que encarar la realidad. Por eso es necesario superar otro de los grandes retos: la crisis humanitaria. No podemos seguir siendo el país que más tenga cifras de violación de derechos humanos. Sindicalistas, periodistas, líderes de oposición y dirigentes políticos asesinados; multiplicación de masacres, falsos positivos, ejecuciones extrajudiciales, fosas comunes; casi cuatro millones de desplazados, miles de amenazados y exiliados. Las ONG estigmatizadas y perseguidas dan cuenta de un país cruzado por la guerra interna. Finalmente los colombianos dejamos en manos de Dios y del Nuevo mandatario nuestro destino, pero confiamos en que este va a ser el comienzo de una nueva era.
Juan Sebastián Morales Forero
